Lo sabemos, te encanta el café tanto como a nosotros. Por eso, hoy vamos a hablar de unas de las partes más desconocidas del café, su relación con la botánica.
El café es una semilla que viene de un arbusto llamado cafeto, puede llegar a medir 10 metros pero se suele podar para facilitar la recolección a un máximo de 3,5 metros. El tronco es recto y liso, con hojas de verde intenso que recuerdan mucho a un limonero.
El cafeto da una flor blanca parecida al jazmín, que sólo dura 3 días y que tarda entre 6 y 9 meses en convertirse en un fruto maduro. Su fruto es una baya de color rojo cereza y, en su interior, es donde se encuentran los granos de café.
¿Sabías que el cafeto puede llegar a vivir entre 40 y 50 años? No obstante, se sustituye entre los 8 y 12 años para que la producción sea alta todo el tiempo. Su rendimiento suele ser de entre 400 a 2.200 gramos anuales.
Otra de las curiosidades del cafeto es que existen más de 60 especies, pero sólo el café robusta y arábica acaparan más del 90% de la producción mundial.
La morfología del fruto del café es una de las grandes desconocidas por la población en general. Muy pocas personas conocen el aspecto de las bayas de café o que la almendra que contiene las semillas está protegida por cuatro capas: cereza, mucílago, pergamino y película.
Con la popularidad que tiene el café hoy en día es común que las nuevas generaciones estudien el origen del café, sus propiedades y su morfología en el colegio. Para el resto de nosotros seguiremos actualizando este blog con ideas, curiosidades e información interesante sobre el café y todo lo que rodea este sector.