Si nos acercamos a cualquier cafetería no tardaremos mucho en ver a varias personas trabajando con su ordenador, a grupos de trabajadores comentando tema o incluso reuniones improvisadas. El café y el trabajo son dos elementos que combinan muy bien y que no se entienden el uno sin el otro, hasta el punto de que las cafeterías se han convertido en oficinas no oficiales.
El rato de tomar café se ha convertido en algo más que un simple descanso, puede ser un momento de reflexión o la ocasión perfecta para debatir un tema y hacer una lluvia de ideas. El componente social del café ha traspasado el ámbito personal hasta convertirse en una herramienta social y un puente laboral en toda regla.
El problema viene cuando cerca de la oficina no hay una buena cafetería, lo que obliga a los trabajadores a desplazarse lejos y perder una gran parte de su descanso. Por este motivo, cada vez son más las empresas que se animan a crear un espacio de café dentro de la propia oficina, una zona de descanso que puede ir desde un pequeño rincón en un recibidor a una estancia con comedor y un equipamiento completo.
Está demostrado que negocio con un espacio de café y descanso hace que sus trabajadores sean más productivos, les ayuda a estrechar lazos, mejora la sensación de grupo y reduce el estrés. Además, al evitar tener que desplazarse se ahorra tiempo y dinero, lo que repercute en la felicidad de todos.
¿Cómo sueles tomar el café durante tus horas de trabajo? ¿Tienes espacio de café en la oficina o sueles ir a despejarte a una cafetería tradicional?
En cualquiera de estos espacios puede tener una de nuestras máquinas de Vitro.