Al ser una bebida tan popular en todo el mundo y, sobre todo entre los más jóvenes, no es de extrañar que su consumo diario sea objeto de las últimas tendencias de la moda en redes sociales, fotografía o en alimentación saludable.
La última “locura” que está arrasando entre las tendencias foodie es el bulletproof coffee, una receta de café con mantequilla y aceite de coco que está creando bastante polémica mientras llena los perfiles de Instagram de millones de personas adictas al café.
El origen del bulletproof coffee viene del Tibet, donde a un turista le ofrecieron una bebida de té con mantequilla de yak. Con ella recuperó la energía para proseguir su viaje y le dio la idea de adaptar la receta con café, al que añadió aceite de coco para enriquecer sus propiedades y darle un sabor y textura más suave.
Uno de los secretos del éxito de este tipo de recetas está en el funcionamiento de la asimilación de nutrientes cuando los combinamos de una forma específica. Del mismo modo que la vitamina E se absorbe mejor cuando se consume junto a alimentos ricos en grasas, las propiedades del café encajan de forma especialmente buena con la mantequilla.
Por otra parte, el toque de aceite de coco es un complemento natural muy rico que ya era famoso en sí mismo por su calidad. Su uso como sustituto de otros aceites está cada vez más extendido y también es muy común utilizarlo en productos cosméticos por sus propiedades hidratantes, su aroma y la facilidad de trabajar con su textura.
Por último, la combinación de café con mantequilla y aceite de coco tiene como resultado un tipo de café más saciante que nos ayuda a pasar la mañana con menos sensación de hambre, lo que puede ser especialmente útil para las personas que estén siguiendo una dieta y no quieran comer snacks entre horas.