9 agosto, 2021

La vuelta a la oficina es inminente: ¿estamos preparados?

Durante el tiempo que ha durado el teletrabajo son muchas las personas que han cambiado su ritmo y se han acostumbrado a ventajas como el de disfrutar de comida casera a diario sin la presión de tener que ir a cafeterías y restaurantes. ¿Cómo se puede reducir el impacto de volver a la oficina y cambiar de hábitos 180 grados de un día para otro. Las máquinas de vending actuales ofrecen posibilidades casi ilimitadas de configuración de producto, y aportan ventajas extra como evitar desplazamientos, accesibilidad al lado del puesto de trabajo, menor coste económico y disponibilidad 24 horas.

No podemos olvidar que hay una gran cantidad de trabajos que tienen turnos de tarde/noche o madrugada donde la mayoría de los restaurantes, cafeterías o tiendas de alimentación ya están cerradas. Hospitales, hoteles, aeropuertos, estaciones de tren y autobús, bibliotecas, universidades, farmacias, empresas tecnológicas y una gran cantidad de negocios ganan muchos puntos si ponen a disposición de sus trabajadores o clientes máquinas de vending con comida y bebida.

La sociedad funciona durante 24 horas y cada vez es más común que en la era de internet encontremos más negocios operativos durante la noche. Viajeros que quieren ahorrar dinero en sus billetes de avión y eligen horario de madrugada, trabajadores de hospital y acompañantes de los enfermos, estudiantes que pasan la noche en la biblioteca de su universidad en época de exámenes, ingenieros de telecomunicaciones y prácticamente cualquier empresa de internet tiene que funcionar a cualquier hora y sin festivos.

El vending es un sector tan flexible que ha sabido adaptarse a las necesidades de cualquier tipo de negocio sin importar su horario, localización o tipo de público. Las máquinas de vending en la oficina suman muchos beneficios para el trabajador y para el propio negocio.

Sin hacer ruido y sin llamar la atención, es muy común ver máquinas de vending integradas entre el mobiliario que nos rodea, aportando la tranquilidad de saber que siempre tenemos una cerca cuando hace falta.