7 marzo, 2018

El reciclaje presiona a la industria del café y del vending

Hace unas semanas os hablamos de la iniciativa que estaban teniendo algunas ciudades para reducir el uso del plástico en las máquinas de vending y de la eliminación de las cápsulas de café de aluminio por una alternativa más sostenible medio ambientalmente. Hoy conocemos la noticia de que varias ciudades europeas están proponiendo el cobro de una tasa específica por el uso de vasos desechables.

El problema de los vasos desechables en los que se sirve café es que no están hechos de papel o cartón al 100%, sino que se clasifican dentro de otra categoría de contenedores de alimentos que tienen un diseño especial para ser más resistentes a las altas temperaturas y a los líquidos. Esto se traduce en que sólo en ciudades como Londres se tiran a la basura 500.000 envases de este tipo a diario.

El funcionamiento de este sistema sería muy sencillo y está basado en el sistema de reciclaje que utiliza Alemania. En este país se cobra un suplemento en todos los envases (cartón, plástico o papel) que se devuelve cuando los clientes depositan estos envases vacíos en máquinas habilitadas para el reciclaje.

En el caso de los vasos desechables, el precio extra sería de entre 5 a 25 céntimos por café, aunque el descuento se aplicaría directamente cuando el cliente se llevase un vaso propio desde casa.

La industria del café y del vending busca así transformar su funcionamiento y adaptarlo aún más a las políticas de conservación y respeto al medio ambiente. Y es que, no basta con que los operadores de vending o los distribuidores de café se conciencien y cambien sus hábitos, es necesario trasladar este cambio a los clientes finales.

¿Por qué tirar a la basura 2 o 3 vasos al día cuando podemos tener en el trabajo nuestra propia taza? Hay ocasiones en las que llevar un termo por la calle no será factible, pero las estadísticas nos dicen que en la gran mayoría de ocasiones tomamos café de camino a la universidad o al trabajo y, en esos casos, llevarnos un termo de casa no implica esfuerzo cuando la recompensa medio ambiental es tan alta.

El reciclaje presiona a la industria del café y del vending