Mark Bittman, uno de los periodistas más famosos de Estados Unidos y columnista del New York Times, ha elaborado una receta para preparar el café perfecto en base a todos sus años de experiencia.
El primer elemento clave que marca la diferencia es la frescura del café, así como la temperatura y la calidad del agua. Y remarca que solemos cometer varios errores que estropean el resultado final: comprar café molido, comprar café con sabor muy suave y, por último, comprarlo hecho en lata en vez de hacerlo uno mismo.
Otro de las claves es olvidarnos de lo más conveniente y la rapidez para comprender que un café profesional bien hecho requiere tiempo, mimo y prestar mucha atención a la técnica que estamos utilizando.
Así pues, otra cosa que tenemos que hacer para conseguir el café perfecto es elegir el grano que mejor funciona para nosotros. Tenemos que perder el miedo a explorar, a probar nuevos sabores y aromas, tenemos que disfrutar equivocándonos y aprender a diferenciar entre matices como la dulzura, acidez, si tiene un toque afrutado…
El siguiente paso es comprar un molinillo de café para preparar nuestro propio café fresco molido. También hay que prestar atención al filtro que usamos, ya que no es lo mismo si solemos hacer una taza al día o si tenemos una máquina de café en la oficina que prepara 40 cafés al día.
Al final del día, lo más importante es ponernos manos a la obra y practicar, practicar y practicar. Ya que, cada persona tiene un gusto diferente y la única forma de descubrir nuestro café perfecto es probando cientos de modalidades.