Los gobiernos autonómicos y Sanidad están dando los primeros movimientos para combatir la obesidad infantil y enfermedades asociadas como la diabetes. Un estudio realizado por Gaceta Sanitaria, una revista científica a cargo de la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (SESPAS), ha descubierto que el 94% de los alimentos vendidos en centros escolares no cumplen las recomendaciones nutricionales.
El dato es aún peor si diferenciamos entre escuelas infantiles e institutos, ya que en estos últimos casi el 100% de los productos tienen un porcentaje de grasa, sal y azúcar muy superior a los recomendados para mantener una dieta equilibrada y evitar enfermedades relacionadas con los malos hábitos alimenticios.
La meta a conseguir es que todos los alimentos que se vendan estén por debajo de las 200 calorías por unidad, que no tenga muchos edulcorantes artificiales o grasas trans, que no sobrepase el 35% de grasas, el 10% de grasas saturadas, tampoco pueden tener más de 0,5 gramos de sal y, por último, los azúcares no pueden representar más de un 30% de todas las calorías.
Las 2 causas más repetidas en el suspenso de este estudio han sido el exceso de azúcar (un 47% de los productos no recomendados) y el exceso de grasas (encontrado en un 45% de los artículos).
Tenemos que recordar que la reducción del azúcar, las grasas y la sal acordada por el sector de la alimentación, los distribuidores y el Gobierno tiene de plazo hasta 2020, ya que no todas las Comunidades Autónomas han terminado de redactar su plan de acción para introducir la alimentación saludable en las escuelas, institutos, centros de formación y espacios públicos.
¿Has notado alguna diferencia en tu ciudad? ¿Crees que ahora se venden más productos saludables que antes?