Los profesionales del vending estamos empezando a ver como la inteligencia artificial se va integrando poco a poco dentro del sector, abriendo un abanico de posibilidades hasta ahora nunca vistas para el vending pero que plantea varias cuestiones.
Por un lado, la IA genera opciones de personalización, reconocimiento de los usuarios y su patrón de consumo, permite a los operadores de vending anticiparse a los picos de consumo y gestionar mejor las rutas de reposición, se pueden vender productos reservados a mayores de edad gracias a la identificación personal y mucho más.
Pero, por otra parte, hay personas que no terminan de ver con buenos ojos que la inteligencia artificial se aplique a todos los campos de nuestra vida. La privacidad y la venta de datos a terceras empresas son temas candentes que ocupan las noticias día tras día, por lo que el sector del vending tiene un reto muy interesante por delante.
La clave está en la forma en la que se aplique esta tecnología ya que, si se mejora el servicio de vending sin comprometer la privacidad de los usuarios, el principal argumento de las personas que están en contra de estos avances deja de tener peso.
¿Imaginas ir a comprar un café y que la máquina de tu oficina te reconozca, sepa tus gustos, tu bebida favorita y te avise de que acaban de reponer tu ensalada preferida por si quieres comer algo?
La tecnología está transformando la forma que tenemos de interactuar entre nosotros y con el entorno que nos rodea. Solo es cuestión de tiempo que el vending dé el siguiente gran paso y nosotros te invitamos a la primera fila para que lo veamos juntos.