En el blog de Azkoyen ya os hemos hablado previamente de cómo el sector del vending está ayudando a sectores tan dispares como a la venta de coches o a las empresas de alimentación saludable.
Hoy vamos a conocer el caso del negocio editorial y periodístico, que está en boca de todo el mundo tras el anuncio de la comisión de Asuntos Económicos y Monetarios de la Unión Europea, que ha anunciado una propuesta para reducir el IVA de libros, revistas y periódicos.
Esta iniciativa pretende, entre otras cosas, potenciar el negocio editorial con una menor presión fiscal usar el impulso de canales de venta en auge como el vending. El nuevo tipo de IVA podrá ser de tipo reducido, superreducido e incluso nulo para los casos más extremos donde esté en peligro el sector de la lectura.
La distribución y venta de libros, revistas y periódicos no pasa por su mejor momento. No sólo se están reduciendo los puntos de venta, sino que gigantes de la distribución online están pujando por exclusivas que limitan aún más la venta al público.
Estamos llegando a un punto en el que ya existen en España cientos de localidades donde no hay una librería donde comprar las novedades editoriales y una gran parte de la población que no utiliza internet no tiene acceso ni siquiera a la prensa escrita.
No obstante, el vending está surgiendo como uno de los grandes aliados del sector editorial, ya que se están instalando máquinas de vending en muchas zonas para facilitar el acceso a la lectura. Porque si en algo coincide todo el mundo es que la sencillez de usar el vending es uno de sus puntos fuertes, y al tener un coste de mantenimiento tan bajo, permite que sea un negocio rentable en muchos puntos donde las librerías ya no lo son.
Hace 10 años nadie hubiese pensado que la pantalla de un teléfono móvil podría desplazar a la televisión, y ahora hay muchas zonas donde en vez de comprar refrescos la gente utiliza el vending para comprar la última novedad literaria de camino al trabajo.