De acuerdo con el último estudio de la Erasmus University Medical Center de Rotterdam (Países Bajos), el consumo de café ayuda a proteger al hígado frente a una fibrosis progresiva que haya sido provocada por una enfermedad hepática ya avanzada.
Las propiedades naturales del café son una discusión común dentro de los círculos médicos y científicos debido a la popularidad del mismo. Por lo que es normal que cada cierto tiempo surjan nuevas noticias que le suman valor a esta bebida.
Este estudio, que ha sido publicado en la revista “Journal of Hepatology”, señala que las enfermedades hepáticas crónicas están relacionadas con malos hábitos de vida y que es fácil que posteriormente la fibrosis derive en una cirrosis a causa de la cicatrización progresiva del hígado.
El sedentarismo, el descenso de la actividad física, dietas poco saludables y el consumo excesivo de alcohol son causas directas de este tipo de enfermedades. Además, en los últimos años estamos viendo un aumento de daños hepáticos causados por la obesidad y el hígado graso.
¿Cómo actúa el café en estos casos?
Según este estudio, el café reduce los niveles de enzimas hepáticas, el riesgo de cirrosis, cáncer de hígado o incluso de hepatitis virales. Todavía falta por determinar si estos beneficios son causados por los antioxidantes, pero los datos generados por los más de 2.400 participantes del estudio no dejan margen de error.
La idea principal de este estudio era la de medir la rigidez hepática y la cicatrización del mismo. Todos los participantes se sometieron a una evaluación física extensa que incluía análisis de sangre, ecografía abdominal, pruebas para ver la rigidez y un estudio de sus hábitos alimenticios que tenía en cuenta alrededor de 400 alimentos distintos.
El resultado de este estudio determinó que el consumo frecuente de café influye en una menor cicatrización del hígado y, por ende, protege al hígado incluso antes de que se desarrolle una enfermedad hepática.